¿Cómo crear ambientes más luminosos?
Para poder reconocer los distintos tips de iluminación, consideramos que es primordial conocer las características principales de la iluminación artificial:
1. Temperatura/color de la luz: Se mide en grados Kelvin y define la coloración de la luz que emite la lámpara.
- Luz cálida: De 3000 a 4000 grados Kelvin.
- Luz Neutra: De 4000 a 5000 grados Kelvin.
- Luz fría: De 6000 grados Kelvin en adelante.
2. Luz emitida por lámpara - Lúmenes: Cantidad de luz que es capaz de emitir una bombilla. A más lúmenes, más brillante la luz. No confundir con los vatios que es el consumo de luz.
3. Haz de luz: Ángulo de apertura con la que sale la luz de una luminaria. El ángulo dependerá de qué queremos iluminar con la luz y reconocer si requerimos luz de destaque, de ambientación o de tareas.
Este último párrafo, nos da pie a poder explicar los tipos de iluminación artificial que solemos utilizar en diseño:
- Luz general/ambiental: Es la luz ubicada para iluminar de forma general todo el espacio. La mayoría de las veces está colocada en el techo o en lámparas de pared o lámparas de pie altas, por encima de nuestros ojos.
- Luz de destaque o acento: Ilumina un elemento puntual como un cuadro, una escultura o un espacio en particular.
- Luz de trabajo: Esta luz nos ayuda a iluminar el lugar donde cumpliremos un trabajo específico, como el escritorio, mesa de trabajo, espacio de maquillaje, entre otros.
Es importante que las pantallas de luminarias no perjudiquen la luz que genera la lámpara, de lo contrario, estaremos restando iluminación al ambiente.
Vale recalcar que tener mayor luz natural en interiores nos ayuda a tener menor consumo artificial, es por ello por lo que nombramos otros consejos para poder tener espacios más iluminados sin abusar de la luz artificial.
Cortinas: No uses cortinas tan gruesas y pesadas o incorpora otras en telas ligeras y tonos claros. Instalarlas más alto del marco de ventana ayuda a que el espacio se vea más amplio. Recuerda que cortar una cortina tradicional antes de llegar al piso nos dará una sensación de menor altura.
Espejos: El uso de espejos no sólo agranda el espacio, también refleja la luz ayudando que el ambiente se vea más iluminado.
Colores: Puedes usar colores de pintura para interiores con poca iluminación. El tono blanco, por ejemplo, siempre refleja la luz, ayudando a crear espacios luminosos, además de aportar amplitud y frescura. Esto no quiere decir que no puedas añadir color en los accesorios, asegúrate que la accesorización sea en tonos vibrantes.
Mobiliario: Optar por colores opacos u oscuros no ayudan a tener mayor iluminación. Podemos usar tonos neutros y añadir color con el uso de cojinería en telas vibrantes; para crear una decoración luminosa.
Pisos: Los pisos también son importantes, se aconseja usar tonos claros que reflejen la luz y de textura no tan cargada. Si cambiar el piso no es una opción, puedes agregar el uso de alfombras en tonos claros, estampados sutiles, que no carguen la visión.
Como último consejo, les sugerimos siempre observar el comportamiento de la luz en nuestros espacios, para poder crear la iluminación de diseño adecuada en los rincones oscuros. Si aún tienes dudas o deseas que te ayudemos a seleccionar la cortina, piso o alfombra que aporte más iluminación en el hogar; agenda una asesoría personalizada y te ayudaremos.